EL GUION

Dándole muchas vueltas, pisoteando cualquier creencia religiosa y estudio teológico reconocido, me reafirmo en mi teoría. El plan que tiene la muerte para cada individuo es inalterable. Cuando llegue la hora te atrapara, hagas lo que hagas. No se puede pensar otra cosa, viendo como se lleva a personas  en circunstancias diversas, que hacen pensar injusta su muerte, con una crueldad tan desmesurada. Entonces digo, si no podemos cambiar eso, será mejor pensar que solo es el final de toda una vida. Un breve acontecimiento, que pone punto y final a la existencia de un ser humano, independientemente de la calidad y duración que haya tenido. Mi inquietud hace inevitable otra pregunta, ¿Qué pasa con la vida, también tiene un plan? ¿Cada uno tiene en la vida lo que le toca y se merece? Lo dudo, parece demasiado elaborado para  aplicar a tanta cantidad de individuos con multitud de condiciones, riesgos y creencias diferentes. Ni siquiera parece que la suerte ni las decisiones de cada mortal tengan importancia, a veces no se puede tener tan mala suerte o cagarla tantas veces seguidas. Me refiero a decisiones del tipo, yo soy optimista, pesimista, amargado, FELIZ o también,  jugar a loterías, pensando que la suerte cambiara tu vida. Utilizando uno de estos adjetivos, creo que la vida parece una sucesión de acontecimientos en cadena que van construyendo una especie de guion, en ocasiones rocambolesco. Diferentes experiencias me obligan a pensar que cualquier decisión, no alterara dicho guion y que además, cualquier intento por cambiarlo, también forma parte del guion.

Vidas con guiones para todos los gustos, imposibles de elegir, a cual más retorcido. Como ese en el que la vida fluye como el caudal de un rio en época de deshielo, con una armonía y  completa seguridad que hacen que el individuo protagonista,  suelte chispas al andar, teniendo las ideas claras. De repente el día menos pensado, comienza a desintegrarse todo y el alma se convierte en una ruina que en SILENCIO pide a gritos, ser enterrada. Pero a pesar de todo tiene que seguir con el guion, porque no ha llegado su hora y no tiene final. Conocemos multitud de  guiones mejores y peores, escritos a medias, que desconocemos como acabaran. Dicho de otra manera, ni siquiera imaginamos que idea tiene la muerte para finalizar el guion y como no podemos cambiarlo, la duración dependerá  de si es un guion de cortometraje o no y si la peli es un drama, thriller o cualquier otro género. Incluso hay veces que el final deja cierta incertidumbre, dejando aquella duda “seguro que hay segunda parte”. Otra vez una maliciosa inquietud me hace preguntarme ¿Qué mierda significa esto, que hay vida después de la muerte? ¡Maldita sea, con el mismo guion! Utilizando otro adjetivo mencionado anteriormente, voy a pensar que en la segunda parte podre elegir. Puestos a elegir, me pido ser tonadillera. No, según mis teorías aun estoy en el primer guion, si  no puedo decidir, prefiero divagar. Cambio de idea, me pido tesorero de partido político, es un guion menos dramático. A ver como acaba la película, con la esperanza de una segunda parte, con un buen guion. ¿La esperanza, estará en el guion? De todas formas, el guion solo es una guía a seguir, para llegar a un determinado fin.